Recomendaciones para el mes de Mayo: el mes de los cambios de color

Se acerca el invierno y con ello una brusca variación en las temperaturas y un aumento en las precipitaciones, por lo que se recomienda disminuir el riego (regar 1 o 2 veces por semana) y volver a picar la tierra, para evitar que se produzcan estancamientos de agua superficial y con ello pudriciones en las raíces de las plantas.

En este mes se notan claramente los cambios en las plantas, aquellas que entraron en el "receso vegetativo" muestran notoriamente sus cambios de coloridos, especialmente todas las plantas de hoja caduca. A raíz de esto, es primordial continuar con la limpieza del jardín.

Una vez que las plantas hayan terminado con su período vegetativo, es posible recoger sus semillas. Esta cosecha de semillas debe ser depositadas en bolsas de papel hasta la próxima temporada.

Una ventaja asociada a las bajas temperaturas y precipitaciones corresponde a la disminución de la acción futura de varias pestes.

Con el comienzo de las heladas, es necesario proteger a aquellas plantas que se encuentran en un estado juvenil y que son sensible a las bajas temperaturas (ibiscos, cedrón, otras).

En el mes de mayo es importante resembrar los césped o sobresembrar aquellas áreas afectadas por el uso humano (pisadas), y también elaborar nuevos prados.

Es recomendable, colocar en su jardín una capita de tierra de hojas o compost, con el fin de protegerlo de las bajas temperaturas que caracterizan a este mes. Utilice algún funguicida e insecticida en su césped, porque este mes suelen hacer su aparición algunos hongos e insectos masticadores que atacan el jardín.